Dejarte ir

Solemos querer a quien por varias razones no está interesado en nosotros. Dicen que las cosas se dan por alguna razón y que si no funciona algo es porque cosas mejores vienen pero en realidad no comprendemos nada hasta que le ponemos un fin porque solo así estaremos en proceso de maduración interna y reflexiva.

En algún momento de nuestra vida nos ha pasado al haber querido a una persona que en su momento es alguien muy especial. Todo es maravilloso y deseamos en el fondo avanzar un paso arriba de la amistad por lo que comenzamos a tratar a esta persona de una forma diferente al resto del mundo. Es demasiado notorio que todos saben de ese interés sentimental que tiene excepto esa persona especial.

Qué triste saber incluso que esa persona no te ve con los mismos ojos con los que lo vez pero a veces es imposible no poder cambiar esto. Hacemos intentos que jamás creíamos hacer por alguien y el resultado sigue siendo el mismo. Desesperados empezamos a evaluar la situación detalladamente para poder tomar una decisión.

Empezamos preguntándonos si esa persona alguna vez ha tenido un detalle con nosotros y si ha hecho al menos alguna de las cosas que realizamos por hacerlo sentir bien. Sé que no debemos esperar a que si hacemos algo por otra persona, ella deba de hacer lo mismo porque no todas las personas deben ser como nosotros. Si hacemos algo tenemos que estar conscientes que no lo hacemos por querer recibir sino más bien porque es un sentimiento que nos impulsa a realizarlo y debemos seguir lo que nuestro corazón nos diga.

Debemos enseñarnos a diferenciar dos cosas distintas. La primera es que si esa persona ha hecho alguna acción para demostrarnos que somos la única persona a la que nos trata distinta al resto de los demás. Y la segunda es que si esa persona ha dado indicios de querer algo con nosotros porque no tenemos que confundirnos con el ser amable o al querer algo con una persona.

Está bien demostrar un sentimiento que tenemos a otra persona solo que a veces tenemos que aceptar aunque nos duela, que esa persona no nos quiere como nosotros la queremos. Es mejor afrontar la realidad porque solo nos hacemos daño si nos seguimos ilusionando que algo puede pasar entre esa persona y nosotros.

Algo importante también a considerar es el trato que nos da esa persona y con eso no me refiero a si es cariñoso o es de esas personas que de muestra sus sentimientos abiertamente. Más bien es al cómo nos muestra interés a nosotros como persona, es decir si existe una comunicación abierta en la que ambos sepan un poco de lo que están planeando hacer en unos días, de algún problema y podía ser incluso de algo espontaneo. De otro modo si esto no fuera así es como si solo hablar con esa persona solo por no perder el contacto con ella a lo que se volvería como una costumbre y solo estar porque sí.

Ya lo había dicho, tenemos que comprender varias cosas. Si estás leyendo esto ahora mismo y tienes dudas, es por algo. Debe ser porque algo anda mal por eso debes analizar bien tu situación empezando por lo que ya te había dicho anteriormente.

Sé que el dejar ir a una persona no es fácil pero siempre recuerda que a veces es mejor soltar a cierta persona y continuar con tú camino. Ya lo han dicho, si quieres algo déjalo ir y si vuelve es tuyo sino nunca lo fue.